La Opinión Popular
                  14:51  |  Viernes 03 de Mayo de 2013  |  Entre Ríos
El clima en Paraná
Groucho Marx dijo: "La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados". En ese punto, Javier Milei es marxista.
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Entre Ríos - 21-04-2024 / 18:04
PANORAMA POLÍTICO ENTRERRIANO

¿Qué hacen Milei y Frigerio frente a la peligrosa epidemia de dengue?

¿Qué hacen Milei y Frigerio frente a la peligrosa epidemia de dengue?
La incidencia del dengue en Entre Ríos aumentó notablemente en los últimos años, caracterizado por un incremento en el número, la escala y la aparición de múltiples brotes que se propagan en regiones que antes no estaban afectadas por el dengue. De manera que ni Frigerio, ni nadie vinculado con la salud pública provincial, debería asombrarse por lo que está pasando en Entre Ríos, que enfrenta una de las peores epidemias de dengue de su historia. Algunos gobiernos provinciales ya destinan recursos para realizar campañas de vacunación sectorizadas (Misiones, Corrientes, Tucumán y Salta) y otros impulsan la fabricación de repelentes en laboratorios públicos provinciales (Buenos Aires, Santa Fe y Formosa) que se distribuyen de manera gratuita. Carente de gestión, Frigerio no está haciendo nada de lo que hacen otros mandatarios provinciales.
La Argentina atraviesa la epidemia de dengue más importante de su historia. Más de 333.000 personas contrajeron la enfermedad en esta temporada; mientras que las muertes por dengue fueron 238. Entre Ríos suma miles de casos confirmados de dengue en lo que va del año. ¿Qué están haciendo Javier Milei y Rogelio Frigerio frente a una enfermedad grave y potencialmente mortal que se refleja en los hechos en la incertidumbre y los temores de la sociedad?

El Presidente, inhumano e insensible a todo lo que tenga que ver con el pueblo, inspirado en un fanatismo liberal libertario y anarco capitalista, de la insolidaria Escuela austriaca del siglo XIX, experimento que nunca se aplicó en ningún lugar del mundo, decidió borrarse por completo en el tema. A tontas y a locas como lo hace casi siempre, Milei rechazó la aplicación de vacunas. "En tres meses los mosquitos habrán desaparecido", consideró. Pero, cambio climático mediante, en muchas provincias argentinas hay Aedes Aegypti todo el año, en continuado. Frigerio, si bien no corea las burradas de Milei sobre el tema, su lineamiento se asemeja al del libertario: no hacer nada.

Es política oficial de Milei y Frigerio dejar que todo lo resuelva el mercado
, sin intervención del Estado, lo que llevó a un festival de especulación con los precios de los repelentes. El concepto más básico de cualquier política sanitaria, la prevención para evitar males mayores, no estuvo nunca contemplada. Sí se habilitó la importación "puerta a puerta" del cotizado mejunje espanta-mosquitos. En la ley libertaria del sálvese quien pueda, el que tiene plata compra y el que no, reza.


Lo único que hacen, Milei y Frigerio, es repartir culpas a la administración anterior y emitir comunicados en los que no se da ninguna señal que calme la incertidumbre de la población, que precisa saber qué hacer, cuando ir al médico, como acceder a repelentes seguros, efectivos y baratos, confiar en una vacuna que, aunque no es perfecta, registra una alta efectividad hasta el momento. No es tiempo de sembrar dudas sobre la vacuna, sino de ponerse los pantalones largos y tomar las riendas de la situación.
 
Hablando sin saber, Milei afirmó que: "La vacuna contra el dengue recién se está probando en humanos". Eso es totalmente falso. La vacuna contra el dengue ya ha sido probada en seres humanos desde el comienzo, en las fases 1, 2 y 3 de los ensayos clínicos y demostró ser segura y efectiva en la prevención del dengue sintomático y la reducción de las hospitalizaciones por dicha enfermedad. Fue autorizada por la ANMAT en abril de 2023.
 
Está demostrado que la vacuna es excelente, pero es cara y debiera ser provista por el Estado. Pero, con Milei no existe el Estado. Con argumento falaz, y pese a la epidemia histórica de dengue, Milei descartó incluir la vacuna en el sistema nacional que la haría gratuita y obligatoria al cuestionar su efectividad, cuando el país alcanza récord de fallecidos en ocho meses de epidemia. Es que este virus no sólo enferma. Si no se atiende a tiempo, mata. ¿Y Milei no la ve?
 
La incidencia del dengue en Entre Ríos aumentó notablemente en los últimos años, caracterizado por un incremento en el número, la escala y la aparición de múltiples brotes que se propagan en regiones que antes no estaban afectadas por el dengue. De manera que ni Frigerio, ni nadie vinculado con la salud pública provincial, debería asombrarse por lo que está pasando en Entre Ríos, que enfrenta una de las peores epidemias de dengue de su historia.

Algunos gobiernos provinciales ya destinan recursos para realizar campañas de vacunación sectorizadas (Misiones, Corrientes, Tucumán y Salta) y otros impulsan la fabricación de repelentes en laboratorios públicos provinciales (Buenos Aires, Santa Fe y Formosa) que se distribuyen de manera gratuita. Carente de gestión, Frigerio no está haciendo nada de lo que hacen otros mandatarios provinciales.

 

Para complicar más aun el problema, el desaparecido ministro de Salud de la Nación, Mario Russo, reapareció y ratificó que no se va a incluir la vacuna en el calendario de inmunización, delegó la responsabilidad a las provincias y municipios, y dijo que "el Estado no es un supermercado para andar suministrando insumos". Y como única estrategia de prevención, recomendó vestirse con pantalones largos y mangas largas para evitar la picadura del mosquito. Dio un ejemplo consumado de su habilidad para la sanitización de manos.
 
Russo, a quien no se le conocía la cara, confirmó que "continuará el combate" contra el dengue, "basado en la evidencia científica y no en operaciones de prensa". Pura sarasa, lo real es que no piensan hacer absolutamente nada. No obstante, el vocero presidencial, Manuel "Cara de Piedra" Adorni, reveló que Milei considera que el ministro Russo desempeña "de manera exquisita" su labor al frente de la cartera. De no creer.
 
El Gobierno de Milei ya había mostrado su costado cruel y desalmado días después de asumir, cuando el presidente viajó a una Bahía Blanca que todavía contaba los muertos que había dejado el tornado del 16 de diciembre. "Estoy perfectamente confiado de que ustedes van a lograr resolver esta situación de la mejor manera posible con los recursos existentes", dijo en aquella oportunidad, lavándose bien las manos, frase que puede resumir su respuesta frente al dengue.
 
Tanto infectólogos como virólogos, expertos en vacunas y en sanitarismo, explican que el dengue es más que uno o dos pinchazos para inmunizarse (aunque los pinchazos, acuerdan, son necesarios en este contexto de epidemia desatada). Reducir la incidencia del dengue se basa en reducir la presencia del mosquito trasmisor del virus y para eso se precisan campañas de salud, intervenciones en las comunidades más afectadas durante todo el año.
 
En Paraná, la Intendencia de Rosario Romero trabaja para mitigar las consecuencias del dengue sobre la Capital, en donde hasta el Ministro de Salud provincial, Guillermo Grieve, contrajo la enfermedad. Promotores ambientales realizan desde diciembre una intensa campaña de prevención. En ese marco, se visitaron más de 10 mil hogares y se profundizó la descacharrización. Además, se atendió y brindó seguimiento a enfermos, y se entregaron 500 repelentes para personas de menores recursos.
 
Milei se ha desligado totalmente del problema del dengue, Frigerio tampoco reaccionó con una campaña acorde con lo que viene sucediendo con este flagelo en Entre Ríos. La estrategia de Milei y Frigerio se vincula en la cuestión de no hacer nada y esperar que en virtud de la baja de temperatura se acentúe el descenso de los contagios, lo que es una incertidumbre, porque no hay certezas de que la emergencia vaya a ceder ya que, de acuerdo a la experiencia del año pasado, podría haber circulación del virus hasta junio o julio. Y volverá en octubre con mosquitos más resistentes a los insecticidas y repelentes, lo que agrava la desidia oficial.
 
Al  mismo tiempo, no se logra salir de la contingencia generada por la falta de producción suficiente de repelentes a precios accesibles. A lo que se le suma, y agranda la inquietud, la advertencia de Milei de que no considera incluir la vacuna en el calendario, mientras que año tras año la situación empeora con más cantidad de casos. Para combatir la epidemia de dengue se necesita de una Política Pública de Salud. Pero el gobierno libertario no piensa así, aunque es más que evidente que el Estado mínimo y ausente, como el que le gusta a Milei y Frigerio, no es la solución para la epidemia del dengue. Tienen que dejar de lado el ideologismo neoliberal libertario y ponerse a gestionar. Demás está decir que esto no cambiará mientras la ciudadanía no salga a reclamar.
 
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CONTEXTO NACIONAL
 
Mientras el salario privado viene de sufrir la mayor caída desde la hecatombe neoliberal de 2001, senadores y funcionarios del gobierno nacional de Javier "el Loco" Milei obtuvieron jugosos aumentos en sus ingresos, algo a lo que también aspiran los directores de YPF. Por su parte, Luis "Toto" Caputo fue por dólares al FMI y volvió colmado de felicitaciones, pero con los bolsillos vacios. Groucho Marx dijo: "La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados". En ese punto, Milei es marxista.
 

¿Qué hacen Milei y Frigerio frente a la peligrosa epidemia de dengue? 
 
La casta tiene aumento
 
La promesa de Milei que el ajuste esta vez lo iba a pagar la casta se estrelló esta semana contra los sólidos privilegios de la clase política. La motosierra y la licuadora les pasan por el costado, aquello de "no hay plata" podrá ser verdad para las universidades, para las provincias, para la obra pública y para los ingresos de la gente común, pero no se aplica a los aristócratas de la política nacional.
 
El asunto estalló después de una sesión de la Cámara alta en la que senadores de todos los bloques pergeñaron una estratagema burda con el objetivo de aumentarse los sueldos y que la cosa pasara desapercibida para el resto de la sociedad que a duras penas le pone el hombro a lo que el propio presidente define como "el ajuste más grande la historia".
 
Mientras el escándalo copaba la agenda de los medios y en redes sociales se repartían culpas entre oficialistas y opositores, el Ejecutivo nacional aprovechaba el ruido para aumentarle el salario a varios de sus funcionarios de primera línea.
 
El que abrió la paritaria fue el cínico vocero presidencial Manuel "Cara de Piedra" Adorni, que fue ascendido al nivel de ministro, lo que implica que duplicará sus ingresos y pasará a ganar más de 4 millones de pesos por mes.
 
Después llegó el turno de los senadores. El aumento comenzó a cocinarse el miércoles a la tarde, en una reunión de la que participaron los jefes de bloque y que encabezó la vicepresidenta Victoria Villarruel, que tenía por objetivo definir el temario de la sesión del jueves.
 
En ese contexto se decidió que el expediente de actualización de las dietas de los legisladores se trataría del modo más discreto posible, sin incluirlo en el plan de labor para que nadie por fuera del Senado supiera de antemano de qué se trataba el proyecto.
 
El proyecto de resolución llegó al recinto con firmas de integrantes de casi todos los bloques, incluida la del libertario Bruno Oliveras, y fue aprobado luego de un proceso que en el mejor de los casos puede calificarse como curioso.
 
"Obra en Secretaría un proyecto de resolución firmado por varios senadores, que está también en las bancas de cada uno, para que sea puesto en consideración", dijo el senador salteño Carlos Romero (Cambio Federal). Villarruel contestó: "Corresponde entonces votar a mano alzada la habilitación sobre tablas del proyecto S.-615/24, de autoría de varios senadores, que obra sobre las bancas, requiriéndose dos tercios de los votos".
 
En ese punto, cualquiera de los legisladores podría haber pedido la palabra para dar o pedir explicaciones, para solicitar que la votación se hiciera de manera nominal o incluso para retirarse del recinto y dejar la sesión sin el quórum necesario.
 
Todos se quedaron callados, se procedió a la votación, algunos levantaron el brazo, otros apenas hicieron un gesto visible, otros se quedaron quietos, la presidenta ni siquiera se tomó el tiempo para contar cuántas manos se habían alzado y dio el proyecto por aprobado. Nadie dijo qué era lo que se estaba tratando y el mecanismo de votación a mano alzada evitó que el voto de cada senador quedara registrado. En menos de un minuto todo estuvo resuelto.
 
Con ese acto sencillo pero emotivo, los senadores se aumentaron las dietas de menos de 2 millones de pesos mensuales a más de 4,5 millones y, ya que estaban, se agregaron un sueldo extra anual, algo así como un aguinaldo. Durante la sesión, que es el momento en el que los dichos y los actos tienen validez institucional, nadie dijo nada.
 
Como después explicó un periodista de los que siempre cubren la actividad legislativa, "los que no votaron con la mano votaron con la cola en el asiento" haciendo referencia a que los que no levantaron el brazo también hicieron su aporte, porque si se hubieran levantado de sus bancas todos los que ahora dicen estar en contra del aumento, la sesión se hubiera quedado sin quórum.
 
Más allá del secretismo que intentaron los senadores, en tiempos de hiperactividad informativa era imposible que tan sugestivo episodio pasara desapercibido. Minutos después de la votación, el asunto ya se había convertido en el escándalo de la semana y el primero en quedar expuesto sobre la picota fue el radical Martín Lousteau por el culposo gesto que hizo para votar.
 
Entonces comenzó la batalla simbólica por despegarse de tan impopular decisión. Desde La Libertad Avanza y el PRO aseguraron que sus legisladores no respaldaron el aumentazo, pero desde las demás fuerzas argumentaron que ninguno de ellos dejó constancia de su rechazo durante la sesión.
 
Como la votación a mano alzada no deja más registro de la votación que la filmación del momento, comenzó una discusión respecto a quien había votado en contra y quien a favor.
 
Para dilucidar la cuestión, el sitio web chequeado.com, especializado en chequeo de información, consultó al doctor en Ciencia Política de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) Facundo Cruz, quien explicó que cuando se procede a votar a mano alzada es porque hay acuerdo político de todos los bloques y porque se asume que todos votan de forma positiva a menos que pidan la palabra para dejar constancia de su rechazo.
 
"Históricamente los proyectos de resolución se votan a mano alzada, es habitual porque no suelen ser conflictivos, hay acuerdo previo", explicó el especialista.
 
Mientras se desarrollaba el escándalo mediático y la indignación se esparcía a través de las redes sociales, el presidente Milei publicó decretos a través de los cuales les dio rango y jerarquía de ministros al secretario de Prensa, Eduardo Serenellini, a la secretara General de la presidencia, su hermana Karina "el Jefe" Milei, y al secretario Legal y Técnico, Javier Herrera Bravo.  Además, amplió en más de 40 mil millones de pesos el presupuesto que tiene Karina Milei para pagar sueldos en el área que conduce.
 
¿Quién figura como director entre muchos otros?: Nicolás Posse, el jefe de Gabinete ¿Quién figura entre los vicedirectores?: Guillermo Francos, el ministro del Interior, quienes pretenden multiplicar por cinco su remuneración y llevarla a la friolera de 70 millones de pesos por mes.
 
La iniciativa está escrita pero el aumento todavía no se concretó, será sometido a votación en la asamblea del directorio prevista para el 26 de abril. De concretarse, los mencionados directores pasarán a cobrar en un mes la misma cantidad de dinero que cobra un asalariado promedio en 20 años de trabajo.
 
Las repercusiones que tuvo el escandaloso salariazo de la casta puso a todos a la defensiva. Milei pidió que los senadores dieran marcha atrás con sus aumentos, pero no dijo nada de los que dispuso él, el senador del PRO, Luis Juez, anticipó que presentará un proyecto para retrotraer los sueldos y el peronista José Mayans fue más allá y propuso que ningún sueldo de la administración pública supere al del presidente, establecido actualmente en cuatro millones de pesos.
 

¿Qué hacen Milei y Frigerio frente a la peligrosa epidemia de dengue? 
 
Muchos elogios pero ningún dólar
 
Una delegación del Gobierno nacional encabezada por el ministro de Economía, el endeudador serial Luis "Toto" Caputo, e integrada también por el jefe de gabinete, Nicolás Posse; el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, y su secretario de Finanzas, Pablo Quirno, trajinó despachos del Fondo Monetario Internacional (FMI) en búsqueda de los dólares necesarios para levantar el cepo.
 
Los funcionarios del organismo de crédito colmaron de aclamaciones a Caputo y destacaron el rumbo de la economía argentina. La titular del organismo Kristalina Georgieva destacó que "la inflación está bajando un poco más rápido de lo que esperábamos inicialmente", ponderó además que "se está avanzando muy rápidamente con el ajuste fiscal" y que "el país está atrayendo la inversión privada para buscar un mejor rendimiento".
 
El problema es que lo único que recibió Caputo fueron elogios, no apareció ninguno de los dólares que fue a buscar y el Fondo dejó indicios claros de que no habrá "plata fresca" para Argentina.
 
Todo seguirá de acuerdo con lo acordado para cumplir con el pago del brutal crédito otorgado por el FMI a la administración de Mauricio Macri, crédito que el propio Caputo en su función de presidente del Banco Central permitió que fuera destinado a financiar la fuga de capitales que caracterizó a la segunda mitad del mandato del expresidente.
 
Durante lo que queda del año, solo habrá préstamos para pagar los vencimientos pendientes de aquel crédito.
 

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Visita de Milei a sus patrones en el foro del Llao Llao
 
Otro episodio saliente de la semana económica fue la visita de Milei al foro del Llao Llao. A diferencia del año pasado, esta vez no hubo referencias a la dolarización pero sí una promesa de alivio de la presión fiscal que se daría cuando las cuentas fiscales así lo permitan.
 
Anticipó que el modelo seguirá con tasas de intereses negativas, como mecanismo para licuar pasivos remunerados y abaratar el crédito al sector privado y negó terminantemente la posibilidad de que vaya a producirse una nueva devaluación.
 
De los dichos de Milei, se desprende que no habrá salida del cepo en el corto plazo, dado que tanto el ancla cambiaria como la contracción monetaria por la vía de la tasa negativa necesitan del cepo cambiario para evitar niveles inmanejables de volatilidad.
 
El tipo de cambio es un aspecto al que cada vez más analistas ponen atención. La mega devaluación de diciembre provocó un fogonazo inflacionario de tal magnitud que prácticamente todos los demás precios le terminaron ganando al dólar. Por más que la inflación haya bajado desde el pico de diciembre, sigue estando muy por encima de la suba mensual de 2% del tipo de cambio.
 
El inicio de la cosecha gruesa dejó indicios de que el campo percibe que el dólar está bajo y que podría aumentar. El ingreso de dólares por exportaciones del agro en lo que va de abril está 16% por debajo del mismo lapso del año pasado que fue muy malo para el agro por la severa sequía. Si el campo demora en liquidar divisas le sumará al gobierno nacional un nuevo factor de presión sobre el tipo de cambio.
 
Uno de los que habló del tema esta semana fue el economista Carlos Melconian, quien estimó que "el dólar libre del 10 de diciembre 2023 (el día que asumió el actual gobierno) da hoy 2.200 pesos. La discusión hoy es que luego del innecesario dólar a $800, la inflación fue del 90% y el dólar subió al 2% mensual. La visión callejera es que estamos en un problema. El dólar de hoy no es genuino, es trabado".
 
Señaló que el dólar "se mantiene en parte por el blend (80% de la exportación liquidada a dólar oficial y 20% al contado con liquidación) y la imposibilidad de pagar las importaciones. Lo sabe todo el mundo. Esto no es un producto de libertad absoluta con inversión, ingreso de capitales, privatizaciones, en la cual uno quiere sacar dólares de la canoa, pero los dólares entran y entran".
 
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Fuente: misionesonline.com
 
 

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